Un nuevo episodio de violencia se desató el último viernes en la cárcel El Inca, en Quito, donde un enfrentamiento entre bandas provocó el fallecimiento de 10 presos. Este acontecimiento se suma a las recurrentes disputas que asolan las prisiones de Ecuador. Asimismo, es el segundo hecho que ocurre en la prisión El Inca, en menos de dos semanas, pues el pasado 7 de noviembre cinco reclusos fueron asesinados.
La violencia que estalló se dio luego de que efectivos policiales ecuatorianos intervinieran el centro penitenciario para el traslado de Jonathan Bermúdez, el líder de banda criminal ‘Los Lobos’, una de las que tiene en vilo al país desde hace varios meses.
El cabecilla de la banda de Los Lobos es el principal sospechoso del motín que estalló el 7 de noviembre, causa por la cual se decidió que fuera trasladado a la prisión La Roca, que cuenta con uma mayor seguridad en Gauyaquil, donde ya permanece aislado y sin poder comunicarse con nadie.
En esa misma línea, según el Servicio Nacional de Atención Integral (SNAI) a Personas Privadas de Libertad, encargado de la gestión de los centros penitenciarios, el esatllido de violencia acontecido el último viernes, tendría como responsables a otros miembros de la banda criminal Los Lobos, a quienes ya se les trasladó a La Roca.
Por su parte, el jefe de Estado de Ecuador, Guillermo Lasso denominó la intervención de las autoridades policiales como exitosa. A través de sus redes sociales comentó que el Gobierno de Ecuador no se dejará intimidar por narcotraficantes. “Advertimos que no nos dejaremos intimidar por mafias narcotraficantes, ahora tendrán que enfrentar todo el rigor de la ley”, manifestó en su cuenta de Twitter.
Cabe señalar que las muertes carcelarias en Ecuador han venido aumentando en los últimos años, pues desde el año 2020 el país norteño acumula 450 muertes, siendo Guayaquil la ciudad en donde se han registrado las mayores masacres, con cuerpos decapitados, desmembrados e incinerados.