Uno de los partidos que más llamó la atención en los últimos años de Copa Libertadores, fue el duelo entre Palmeiras y Atlético Paranaense, que destronó al bicampeón de América. En la vuelta Terans se vistió de héroe para poner al equipo de ‘Felipao‘ Scolari en su segundo final continental. El duelo de ida terminó muy parejo y definiéndose por un solo gol. El actual campeón de la Sudamericana logró tomar ventaja de cara a esta revancha definitoria en terreno del ‘Verdao’, un partido donde la ´12´ se sintió desde el minuto uno, pero quedó en mute tras la remontada de visitante.
En los planes de encaminar la serie en los segundos 90′, siempre en la lista está anotar rápido y eso lo consiguió el cuadro local en los primeros minutos, Gustavo Scarpa apareció a los 3´ para desatar la locura en el Allianz Parque. La final estaba a un gol de diferencia, era posible la hazaña, Paranaense no despertaba y se quedaba como un mero espectador ante el surgimiento de Palmeiras, pero un error fatal desestabilizaría todo.
Murilo Cerquiera no podrá dormir esta noche al saber que su falta en el último minuto del primer tiempo, dejaría a su equipo con 10 jugadores, eso fue tras una revisión del VAR tras una patada grosera. El cuadro local tenía el favor en el marcador y sus hinchas, pero este golpe era muy difícil de digerir, aun así dieron pelea hasta donde pudieron y por un momento estuvieron dentro de la final continental.
Nuevamente, el plan se resumía a golpear rápido y el ´Furacão´ aun no despertaba a pesar de ahora tener la ventaja numérica, así fue que apareció el central paraguayo y capitán Gustavo Gómez para marcar el desempate a los 55´, Palmeiras estaba en la final y solo quedaba mantener el resultado. Lamentablemente para ellos, el equipo de ´Felipão´ Scolari finalmente se dio cuenta que a pesar de ir dos goles debajo, descontar los devolvía al partido.
Razón tenían para creer en una remontada, le tenían agarrada la mano al cuadro paulista. En sus últimos dos encuentros le ganaron al ‘Verdao‘ y ahora solo necesitaban un empate para meterse en la final. Así primero apareció Pablo a los 64´ para marcar apenas ingresado al terreno. Todo volvía a cero, pero ahora Palmeiras sentía la ausencia de un jugador y Paranaense tomó ventaja lanzándose por la gesta. Los de Paraná no querían esperar la fortuna de los penales y en el final llegó el ansiado desahogo.
David Terans, el redentor le pegó con un remate desde fuera del área que llevaba consigo la ilusión de la ciudad de Curitiba a los 85´. Tras un desvió silenció el Allianz Parque para llevar a su equipo a la final de la Libertadores luego de 17 años. El sueño del tricampeonato terminó para los de Abel Ferreira que lo dieron todo hasta el final, pero no pudieron contra el ´Huracán´ que buscará resarcir su caída en el 2005 para esta vez coronarse campeones de América.
