Tras las desafortunadas declaraciones del ministro de Educación, Morgan Quero, en las que señaló que las violaciones de menores por parte de profesores en la comunidad Awajún como una ‘práctica cultural’ el Jefe del Gabinete, Gustavo Adrianzén ‘salió a su rescate’ y señaló que el Gobierno rechaza todo tipo de violencia contra menores en el país.
“El Perú se reconoce como un país que no permite, por ningún motivo, el abuso sexual contra nuestros niños, niñas y adolescentes. Nuestras obligaciones como Estado democrático no permiten ni justifican este delito“, manifestó.
Acerca del caso que generó el revuelo, cuestionó que el Estado haya desatendido a dicha comunidad e indicó que hará lo posible para que el Ejecutivo brinde asistencia a la población afectada. “Las víctimas recibirán atención integral”.
Cabe resaltar que el pasado 10 de junio el ministro Quero habló sobre las violaciones denunciadas en esta zona de país entre 2010 y 2024 y ofreció unas declaraciones que según él, se malinterpretaron. “Si es una práctica cultural [que] lamentablemente sucede para ejercer una forma de construcción familiar, vamos a ser prudentes, pero también exigiremos una respuesta a la población. Si a estas niñas las violaron, no nos va a temblar la mano“.
Varias organizaciones civiles, así como algunos congresistas de la República, manifestaron que el titular de Educación debería presentar su renuncia al cargo ‘por justificar agresiones sexuales a niñas Awajún’. Por otro lado, el Colegio Médico del Perú rechazó sus declaraciones y le pidió que se retracte de sus expresiones y cumpla estrictamente con la Convención sobre los Derechos del Niño en los sectores de salud y educación.