Programa materno del JAMO sin cunas ni equipos pese a presupuesto de más de S/ 200 000

REDACCIÓN
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El Programa de Salud Materno Neonatal del Hospital Regional “José Alfredo Mendoza Olavarría” (JAMO II-2) atraviesa serias deficiencias en equipamiento y atención, según un informe de la Contraloría General de la República. A pesar de contar con un presupuesto de más de S/ 236 000, este no se ha utilizado adecuadamente debido a la decisión de la anterior dirección del hospital de unificar los fondos en un presupuesto conjunto.

Solo 3 cunas para atender a más de 5000 embarazos al año

El servicio de neonatología del hospital dispone únicamente de tres cunas para recién nacidos, cantidad insuficiente para la demanda anual de más de 5000 embarazos en Tumbes. En lo que va del 2024, es decir, en nueve meses, el JAMO II-2 ha registrado el nacimiento de 1277 niños y niñas, de los cuales 9 fallecieron, lo que refleja la inadecuada atención del servicio por parte de este centro de salud.

En ese contexto, la gerente regional de la Contraloría en Tumbes, María Elena Molina Camacho, criticó la gestión del presupuesto asignado al programa neonatal, señalando que “tener solo tres cunas es insuficiente para la demanda de la región, y la falta de insumos agrava el problema”. El hospital regional atiende a una población de 237 000 personas en la región.

Infraestructura deficiente y falta de insumos

La Gerencia regional de Contraloría detectó, además, cinco incubadoras inoperativas y la falta de equipos básicos como un balón de oxígeno movible, oxímetros y un aspirador de secreciones. En la unidad de cuidados intermedios, la situación es igualmente crítica: solo hay siete cunas, una incubadora operativa y pocos manómetros, mientras que no se cuenta con oxímetros ni suficiente ropa hospitalaria.

En la unidad de cuidados intensivos, dos incubadoras presentan fallos y no hay catéteres umbilicales, balanzas ni placas radiográficas disponibles. Otras áreas críticas, como la sala de emergencias obstétricas, también enfrentan problemas graves. El ecógrafo distorsiona las imágenes, lo que dificulta el seguimiento del estado del bebé en gestación, y el ambiente está deteriorado, sucio, con hacinamiento, y equipos defectuosos como el contador de latidos, que tampoco funciona.

Presupuesto no ejecutado

A pesar de contar con un presupuesto de S/ 236 000 destinado específicamente al Programa de Salud Materno Neonatal, la anterior gestión del hospital regional decidió unificar los fondos y destinarlos a distintas áreas, lo que impidió cubrir las necesidades urgentes del programa. “En lugar de utilizar los fondos para mejorar el área neonatal, se realizaron gastos generales sin diferenciar por programas”, explicó María Elena Molina, gerenta regional de Contraloría en Tumbes.

Molina detalló que el ecógrafo tiene imágenes distorsionadas, lo que dificulta monitorear el estado de los bebés durante la gestación. Asimismo, las paredes de la sala están cubiertas de moho y humedad. “Con el presupuesto asignado, podrían haberse comprado materiales quirúrgicos, sábanas, o mejorado las camillas. Incluso la única silla de ruedas disponible para trasladar a las madres en labor de parto no está funcionando”, agregó.

La gerana regional también precisó que, a marzo, los S/ 236 000 asignados no fueron ejecutados de manera exclusiva para el programa. “Se ha hecho un solo fondo y se han destinado los recursos a diferentes áreas. No se ha determinado cuánto se utilizó específicamente para el Programa Materno Neonatal, lo que ha dificultado la mejora de los servicios”, puntualizó.

María Elena Molian Camacho gerenta regional de la Contraloria en Tumbes. / Foto: Contraloría General de la República.

Respuesta de la nueva dirección

Ante las denuncias, el nuevo director del hospital, Óscar Zapata, señaló que aun no había tomado conocimiento oficial del informe de la Contraloría. Sin embargo, afirmó que ha solicitado a la Administración y a Logística “un documento detallado de los gastos realizados con el presupuesto del Programa Materno Infantil para evaluar la calidad del gasto y tomar medidas correctivas”.

Zapata subrayó que su principal objetivo es ordenar las deficiencias administrativas y sancionar a los responsables de la mala gestión del presupuesto. “Estamos comprometidos en mejorar la atención y equipamiento del hospital para garantizar un servicio adecuado a las madres y recién nacidos de Tumbes”, concluyó.

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